Page 215 - DOCENCIA E INVESTIGACIÓN, MECANISMOS DE REFLEXIÓN Y CAMBIO EN LATINOAMÉRICA
P. 215

REDES 02






            Actualmente, se ha podido establecer que el humano llegó a la escritura y a la lectura tras lentas y
            prolongadas etapas; vestigios como los encontrados en las cuevas de Altamira en España y Las-
            cuax en Francia permiten establecer que los orígenes de la lectura y la escritura se remontan hasta
            30 000 años a. C.: se trataban de pinturas y dibujos rupestres que tomaron la forma de imágenes
            sencillas elaboradas con simples trazos o puntos, las cuales quedaron, como ya se mencionó,
            grabadas en las paredes de diversas cavernas que fueron habitadas por el ser humano primitivo.

            Al respecto, Robert Claiborne (1982), destacado investigador de la evolución del hombre y editor
            de los libros de Time Life, señala que “estas primeras imágenes fueron elaboradas con la intención
            de que fuesen un registro, un documento, ante la necesidad que tuvo el hombre de aquel tiempo
            de almacenar información —reforzando así la memoria— y de comunicarla a una distancia supe-
            rior a la que alcanzaba la voz humana. Esta comunicación, independientemente de donde se haya
            producido por primera vez, constituyó la primera etapa de la protoescritura y de la protolectura,
            o sea, la escritura y la lectura en embrión” (pp. 10-11). Hoy en día existe una gran diversidad de
            definiciones múltiples y acertadas en torno a la lectura, ya que, en cada una de ellas, se contempla
            una serie de categorías conceptuales que ofrecen diferentes aspectos sobre esta capacidad emi-
            nentemente humana y que permiten su análisis en toda su complejidad.

            De entre la totalidad, se puede mencionar aquella que señala a la lectura como un placer o gozo
            del texto. Al respecto, Roland Barthes (1993) expresa que “la lectura vista como el placer del texto,
            es similar a ese instante insostenible, imposible, puramente novelesco que el libertino gusta al tér-
            mino de una ardua maquinación haciendo cortar la cuerda que la tiene suspendida en el momento
            mismo del goce” (p. 15). Así, el texto de placer “es el que contenta, colma, da euforia, proviene de
            la cultura, no rompe con ella y está ligada a una práctica confortable de la lectura” (Barthes, 1993,  Docencia e investigación, mecanismos de reflexión y cambio en Latinoamérica
            p. 25). Por su parte, George Steiner (1997) expresa que “la lectura no es otra cosa que el cierto,
            el verdadero y sobre todo la cabal realización del texto, la cabal realización de la obra, como una
            coronación, como una gracia particular que pone el punto final” (p. 46). Es literalmente una coo-
            peración, una colaboración íntima, interior “y también una elevada, una suprema y singular, una
            desconcertante responsabilidad. Es un destino maravilloso y casi aterrador que gracias a la lectura
            tantas grandes obras, tantas obras de grandes hombres y de hombres tan grandes, aún puedan
            recibir una culminación, un acabamiento, una coronación por parte nuestra” (Steiner, 1997, p. 46).
            Los modelos de formación superior universitaria impulsados por la Unesco y la OCDE.


            En el contexto internacional, dos modelos para la educación superior universitaria han venido sien-
            do impulsados desde hace varios años por igual número de organismos multilaterales involucrados
            en el campo educativo, a saber, el propouesto por la OCDE y el impulsado por la Unesco. En am-
            bos se ofrecen respuestas pertinentes para enfrentar los retos económicos, sociales y educativos
            que exige la sociedad en el umbral del siglo XXI. A continuación, se analizará cada uno de ellos
            para establecer, en sus respectivos contextos, la importancia de la lectura en estos nuevos mode-
            los de formación superior universitaria.


            EL MODELO DE EDUCACIÓN SUPERIOR UNIVERSITARIA DE LA UNESCO
            La UNESCO ha señalado desde hace varios años, a través de sus múltiples publicaciones, infor-
            mes y foros mundiales, que para enfrentar los cambios del siglo XXI, dominado por la globalización,
            la competitividad, la eficiencia, la calidad, la excelencia, el multiculturalismo y el auge tecnológico,
            se debe de impulsar una educación para toda la vida.
                                                                                                           215
   210   211   212   213   214   215   216   217   218   219   220